El Mensaje Espiritual para el día de hoy es el siguiente:

Hoy debo referirme a los hechos que estáis viendo, cómo la tierra está convulsionada con vuestros pecados. La falta de fe se está acentuado cada día más, pues ya estáis más cerca de la llegada de mi peor enemigo. Estáis ya en la etapa regresiva, en el conteo final que desembocará irremediablemente en el caos como es que, Maitreya, venga a posesionarse del mundo que me pertenece, pero, que él, como es el usurpador por antonomasia, reclama para él, con sus secuaces que son aquellos que han colaborado para que estos acontecimientos se precipiten. Escuchad atentamente hijos míos: Seguid repartiendo los desagravios, no desfallezcáis porque, entonces, ¿cuál es vuestro compromiso en la salvación de las almas? Seguid adelante sin cansaros, que el triunfo será grande como os he venido diciendo. Está asegurado, pero es también con vuestra ayuda, así lo hemos querido nosotros, ¿cuál objeto tendría que todo sea de parte nuestra? ¿Y vosotros? NO, hijos míos, es con vuestro sacrificio, oración, penitencia, nada de soberbia y prepotencia; no es enviando a las almas al infierno sin sacrificaros por ellas. No es anunciándoles castigos como se van a enmendar, es con vuestra entrega y amor hacia Nosotros que serán dóciles, por ello, si queréis que vuestras familias se salven, está en vosotros, sois los responsables por ellos. Pues dependen de vuestro amor, entrega, penitencia, oración y sacrificios, esa es la manera para que ellos entiendan que están equivocados y cambiarán, de lo contrario, se volverán peores y nada conseguiréis. Es con vuestro ejemplo, aunque nada digáis, que vean vuestro cambio. Es necesaria la oración. Pedid con fe y se os dará, pero unido a todo lo anterior, de lo contrario, estaréis perdiendo vuestro tiempo dada vuestra terquedad y desobediencia.

Si hacéis como Yo os estoy guiando, veréis maravillas, pues contemplaréis anonadados el cambio en estos espíritus, os lo aseguro. No os afanéis por quienes no os han vuelto a llamar. Recordad que os he dicho: Muchos son los llamados y pocos los escogidos. Pero sembrad la semilla, no importa. No os canséis pensando en que no dará fruto, sí dará. Algunos la dejarán pasar, o la ahogarán con su indiferencia y su falta de fe, pero en otros renacerá y crecerá vigorosa, vosotros después os daréis cuenta de cuántos la escucharon y pusieron en práctica vuestros consejos, por eso, seguid adelante sin mirar hacia atrás, cuidad eso sí vuestra salud, para que estéis en buenas condiciones físicas para el trabajo que se os viene y que debéis estar muy bien en todo sentido, es decir, de alma y cuerpo. Este es el Mensaje Espiritual para el día de hoy.

ARROJAD LA SEMILLA

La semilla dará fruto, que recogeré para haceros un don cuando vengáis. Vosotros podéis sembrar, tú escuchando y escribiendo, y tú copiando y escribiendo. Cuando pienso en el resto, pienso en Vosotros, he pensado siempre en Vosotros, os lo he demostrado. Estad tranquilos y caminad junto a mi… ¡Arrojad la semilla!

¡Sembrad!

Con el ejemplo y con el corazón, con la palabra nueva. Este milagro que se renueva en ti, que tú expandes, porque crees en Dios. Este milagro que muchos de vosotros no comprenderéis y no creeréis posible. Y, sin embargo, es milagro, semilla de fe, de esperanza de vida.

Sembrad con las obras, con el amor, con la caridad y con estas palabras nuevas que, no obstante, son antiguas, pues provienen de Mí que soy el verbo. Antiguas y siempre existidas porque la verdad es de Dios, y Yo estoy en Dios, y Dios y Yo siempre hemos existido. Es de la eternidad de lo que Yo os hablo. Y mi voz se transforma en un escrito de una hoja, sobre un libro, hace mover una mano. Son los instrumentos que Yo uso, mis instrumentos humildes, escondidos, normales. Lo que aparece ante vuestros ojos es lo que el instrumento escribe sin mirar a la pluma. De esta manera, con estos medios, vivís el sentimiento de lo que Yo os digo, os pido, os exhorto. Y ahora que os he dado tantas semillas, usadlas. Quien os escuche dará sus frutos, quien no os escuche enseguida, lo hará después. Yo y vosotros en Mí, nunca hacemos nada en vano. Las semillas crecerán, se multiplicarán. Ya han dado frutos abundantes.

¡Sembrad, hijos e instrumentos míos!

El Mensaje Espiritual para el día de hoy 4 de febrero de 2010 es el siguiente:

Hoy debo referirme a las circunstancias en que os encontráis. Fue necesario que llegarais a este sitio de reclusión para personas enfermas, para que os dierais cuenta, hija mía, lo que es el dolor, que tú no conocías pero que ya lo habéis experimentado en su forma más primitiva. Es algo que debéis conocer para hacer conciencia del sufrimiento de los seres humanos y, así, podáis experimentar el dolor de vuestro prójimo con el fin de entender lo que viví y tuve que padecer para que se operase el misterio de la Redención. Pues, sin dolor, no hay sacrificio. Es el día a día de triturar vuestro corazón, cada momento, cada hora, cada minuto, cada segundo. Es experimentar el abandono, el cansancio, la fatiga, sobrellevar la serie de inconvenientes que se presentan de incomprensión de unos, el desprecio de otros, todo esto es un conjunto de circunstancias que el ser humano debe sobrellevar en el curso de su vida, para llegar al Reino de los Cielos purificado en el amor a su Creador.

Habéis tenido la oportunidad de vivir en el mundo, pero no sois del mundo, como siempre os lo he repetido. Por eso las máximas del mundo no las debéis escuchar, pues son cantos de sirena efímeros y que no os conducirán sino al castigo eterno por haber violado mis leyes inmutables que son Sabiduría Eterna, para que cumpliéndolas y acatándolas no os arrepentiréis sino, al contrario, veréis la Eterna Luz que nunca se apaga. Entonces comprenderéis el por qué insistía tanto en mostraros la verdad, no debéis olvidar jamás que Yo soy el camino, la verdad y la vida, y que nadie, absolutamente nadie, va al Padre sino por Mí.

He querido que llegases a este sitio para que tengas una visión clara de vuestra responsabilidad para con Nosotros, para que paséis a otra etapa del conocimiento en este arduo camino que es vuestra vida espiritual. La madurez es necesaria para una sólida formación en el Apostolado, encontraréis dificultades que sortear, tropiezos que vencer, y pruebas que superar, pero, con nuestra asistencia y vuestra obediencia, llegaréis a feliz término. He querido también que experimentaras lo que viviste anteriormente, fue una vivencia espiritual grande, muy grande, que fortalece tu alma de niña y creció en fortaleza, que era necesaria para esta misión que llevas. Creceréis espiritualmente con el fin de ayudar a los demás a encontrarse a sí mismos, como también a encontrar otra dimensión que transmitiréis a quienes están en este momento contigo, pues es la mejor manera como se multiplicará el Apostolado. Con ello, tu alma irradiará no solo paz, también fortaleza que, a medida que lleves a cabo la oración con las personas que te acompañan en estos momentos, ellos serán los primeros beneficiados por el amor nuestro y por vuestra obediencia a mis mandatos, sus almas recibirán también fortaleza en sus espíritus, para difuminar la verdad en este caótico mundo. Es así como se esparcirá en el Universo y, con ello, el triunfo nuestro.

Ese es el objetivo final de todo. Pues veréis al género humano sometido a vuestro Dios y Señor en un solo haz de voluntades, felices por toda la eternidad. Este es el Mensaje para el día de hoy.

El Mensaje Espiritual para el día de hoy 24 de febrero 2010 es el siguiente:

Hoy debo referirme a la situación de incertidumbre en que a veces os encontráis, es dura, es verdad, pero es esa situación actual del mundo, por ello dije un día: ¿acaso cuando vuelva encontraré fe en la tierra? Y eso es precisamente lo que está sucediendo en estos momentos, el abandono de la fe es casi total, el avance de las sectas y de la incredulidad es impresionante, se han ido mis hijos a servir al enemigo. Dispersaron el rebaño y andan como perdidas mis ovejas sin pastor, esa es la triste realidad que hoy contempláis vosotros anonadados, pero Yo quiero que, a pesar de este mal momento en que os encontráis, no os acobardéis ante nada, los quiero fuertes, vigorosos, no os amilanéis porque, sabedlo de una vez por todas, estáis conmigo acompañándome en estos duros momentos de gran calamidad cual no ha habido ni habrá. Estáis en los momentos en que todo está prácticamente acabado. Pero Yo Soy el que Soy, y os prometo que con vuestra firmeza y fidelidad sacaré nuevamente mi Iglesia fortalecida y volverá vigorosa de la gran tribulación en que se encuentra. Vigilad, orad y no os apesadumbréis, pues sabed que cuento con vosotros para que no desfallezcáis. Adelante mis valientes soldados, no desconsoléis cuando contempléis lo que vais a seguir viendo, pues nada podrá borrarme de la faz de la tierra, pues mi triunfo está asegurado. Seguid fieles a Mí, repartiendo los desagravios a donde fuereis, y no olvidéis el viaje a Manizales, es importante porque muchas almas están sedientas de recibirlos. Confiad y pedidme el don de la Fortaleza, que se os ha olvidado pedirme y que es vital para todos en estos momentos, os amo y quiero vuestro corazón, así como también los corazones de los hombres, ese es mi triunfo final que todos se unan a Mí en un solo credo. Por eso el desagravio a la Santísima Trinidad. Queremos el amor total de nuestras criaturas reconociendo el mal comportamiento y que, arrepentidos, vengan a Nosotros. Les perdonaremos sus faltas y serán uno con Nosotros en la Gloria. Este es el Mensaje para el día de hoy.

Hoy debo referirme al padre (sacerdote). Debo deciros que él se encuentra en estos momentos en una gran confusión espiritual producto de su desobediencia a mis mandatos, por eso está reaccionando en esta forma, un poco temeroso y a la vez inseguro, pues esto le sucede a quienes no reaccionan y siguen haciendo caso omiso a mis llamados, ya lo habéis visto, cómo intuye quien está detrás de esas cartas respuesta. Pero lo peor es que aun así no quiere dar el brazo a torcer, es decir, a obedecernos en lo que queremos para el bien de mi pequeño rebaño. Ya habéis visto cómo desde el día que regresó del exterior, empezó muy mal, rechazando tu casa para celebrar la Santa Misa como era mi deseo, prefirió la casa de las Peñas cuando están tan mal enfocados en sus creencias, pues continúan ofendiéndome allá en la nueva fraternidad haciendo caso omiso a mis advertencias, claudicaron y se encuentran en estos momentos confundidos, pero no hacen nada para salir de esta terrible apostasía. Ya verán cómo, cuándo se den cuenta, cómo llorarán lágrimas y lágrimas, pero eso fue lo que quisieron cuando hicieron caso omiso a mis enseñanzas. Es la triste realidad que está viviendo mi Cuerpo Místico, pues son muy pocos los que en este momento me acompañan como sois vosotros. Pero también es cierto que estoy recogiendo mi rebaño con los desagravios, veréis maravillas dentro de muy poco, empezaréis a cosechar lo sembrado, lo más importante ahora es que no desfallezcáis por nada del mundo; no os descorazonéis por no ver resultados, eso no tiene que afligiros, pues sabedlo, si estáis con Nosotros, ¿quién contra vosotros? Oídme bien, seguid rezando, pidiendo piedad y misericordia, que mucho lo necesita este mundo contaminado de incredulidad y de maldad sin límite. Ya veis cómo salieron los hijos de las tinieblas a prepararse “espiritualmente para la llegada de su mesías”. Infamia ésta no la habido ni la habrá jamás. Es urgente que no demoréis las cosas, pues esto retrasa la misión, es importante enviar a mi hija Amparo lo que le estáis prometiendo, esto debe ser muy pronto, atended pues para que no vayáis a caer en desobediencia a mis mandatos. Os queremos muchísimo, dentro de poco tiempo veréis los resultados, eso os lo aseguro, pues mi triunfo no lo puede detener las huestes asesinas y criminales que desean la perdición de las almas redimidas por Mí a precio de sangre. No lo permitiré, pues ya verán cosas maravillosas que aún os falta por contemplar, seguid resistiendo, así como vais, así he querido que paséis esta amargura de carencia humana, pero, recordad, que Yo estoy con vosotros, no lo olvidéis al igual que mi Padre, el Espíritu Santo y mi Santa Madre, por ahora seguid sembrando la semilla como un día os dijo vuestra madre de la tierra. Yo permití esta comunicación para que te cimentara en esta misión tan grande, hija mía, seguid, seguid, aún contra todo pronóstico humano; pues somos Nosotros que os guiamos. Nada temáis, nada os debe afligir, por nada debéis perder la paz que procede de Nosotros, porque si la perdéis estaréis en problemas muy graves, pues el demonio empezará a inmiscuirse en todas vuestras cosas para perderos. No cedáis ni un milímetro en ese intento; recordad lo que os estoy diciendo para que no vayáis a caer en desobediencia, pues él lo que quiere es angustiaros para lograr su objetivo, alejaros de Mí, ¡cuidado! Esto es muy grave, os lo advierto para que me entendáis.

Este es el Mensaje Espiritual para el día de hoy.

El Mensaje Espiritual para el día de hoy, 14 de agosto de 2010, es el siguiente:

Debo referirme, hija mía, a todos los acontecimientos que se han venido aproximando y que desembocarán de manera irremediable en la aparición de mi peor enemigo (anticristo), que será sentado en la silla de mi hijo Pedro y que los traidores de mi Iglesia le van a colocar allí mismo para otorgarle el poder como “jefe de todo el mundo”, esto en cuanto al poder religioso, y los políticos de todo el mundo le darán el poder político. Grandísimo error, hijos míos, pues satanás en el mundo ordenará, como desde ya lo está haciendo, por el gobierno más corrupto e infame que jamás se haya podido contemplar en todos los tiempos.

Es hora de aproximarnos a todo lo que he manifestado en muchos escritos, preparaos pues ya es el momento en que vais a vivir estos acontecimientos, hijos míos. Estad preparados con la armadura de Dios porque los tiempos serán muy malos, pero Yo os acompañaré, estaré con vosotros, guiándoos, porque a pesar de todo, seguiréis en la misión, por eso os acompañaremos Nosotros, no os preocupéis, que estaremos instruyéndoos, seguid adelante, ni un paso atrás por vuestro bien y la salvación de las almas.

Este es el Mensaje Espiritual para el día de hoy.